sábado, 9 de noviembre de 2013

El lenguaje transforma la realidad.

La pragmática se refiere al uso del lenguaje para transformar la realidad, desde lo que dice un padre a su hijo para que deje de tener miedo a la oscuridad hasta los argumentos que candidatos a la presidencia u otros cargos públicos utilizan para ganar la simpatía y el apoyo de los ciudadanos. El uso de la pragmática provoca cambios en la estructura neurológica del cerebro y éste se ve obligado a actuar y responder de acuerdo a esa nueva estructura que también es mental. El constructivismo y la pragmática son siameses, ambos aseguran que la realidad se construye a partir del lenguaje y por lo tanto también cambia a través del lenguaje en si. 

Cuando te dices a ti mismo "no puedo terminar mi carrera" tu mismo estas diseñando una realidad donde no vas a terminar tu carrera y una gran cantidad de nuevos caminos emergen de forma real en donde tendrás que conseguir un trabajo mal remunerado para poder mantenerte y de ahí todos los objetivos sobre diversión y esparcimiento que tenias mientras estudiabas se desvanecen y emergen nuevos objetivos mas dramáticos tendientes a la supervivencia. Lo anterior se desprende de un solo pensamiento que se convierte en realidad, la pragmática y el constructivismo actuando como enemigos precisamente por no darte cuenta que lo que piensas es lo que se materializa. Para transformar la realidad no debemos tener ni una sola duda de que podemos hacerlo. Obama no sería nada sin sus discursos y su elocuencia, logró convencer y transformar una realidad que solamente veía su alternativa en películas de Hollywood: que un presidente de los Estados Unidos de America sea afroamericano cuando hace muy pocas décadas las personas de color eran solamente esclavos, sin derecho alguno, sin posibilidad de decidir sobre sí mismos y menos sobre el futuro de una nación. 

La pragmática es responsable por cualquier cambio en tu vida, en la sociedad y en la historia, es una fuerza imparable que no tiene sentido moral, los criminales la usan, el único requisito es ser un ser humano. Los animales no cambian su realidad, solo se adaptan a ella. Esto se debe a que la realidad es una imagen social y cultural. Los cambios que podemos provocar se dan a nivel social y cultural, no podemos cambiar la trayectoria del planeta ni el sentido de su rotación, podemos llegar a pensar que la tierra es plana y el centro del universo, esto genera una realidad que impacta en la sociedad y la cultura pero de ningún modo el pensar que la tierra es así hace que la tierra sea así, sin embargo no importa como sea la realidad en realidad, lo importante es lo que nosotros pensamos como es la realidad porque entonces la realidad se convierte en eso, calza, encaja. Solo el error produce un desgarro en los hilos de nuestra realidad, nos obliga a repensar y adaptar nuestro pensamiento, pero también es posible mantener la realidad insostenible mediante amenaza de ser quemado en la hoguera si pretendemos ir contra la diosa realidad.

Pequeños cambios, cambios que se dan de forma individual pueden desencadenar una avalancha de cambios mayores si se dan simultáneamente. Sin embargo, las fuerzas que emergen siempre encuentran su contraparte, estructuras que su función es estabilizar la realidad construida por los que ostentan el poder, esas fuerzas están encarnadas en personas que representan a la iglesia y al estado, en menor escala las fuerzas al interior de la familia recae sobre los padres que intentan imponerte una realidad que a ellos les parece el camino a seguir. Construye tu propia realidad, eso jamás te ocasionará arrepentimiento porque habrás hecho lo que tu te propusiste y no vivirás la realidad de alguien más que inclusive lucra con tu desgracia.


miércoles, 18 de septiembre de 2013

La Emergencia y lo Emergente.


Nuestro temor a la naturaleza proviene de muestras tan claras como terremotos o inundaciones. Desde nuestra más primitiva historia se ha distorsionado la relación mente/naturaleza, hemos conceptualizado a la naturaleza como enemiga. Para lograr contrarrestar el maléfico comportamiento de natura dedicamos nuestros mayores esfuerzos a entenderla y derrotarla. Siempre hemos creído que nuestras ciudades son el logro más importante en la tarea de dominar el medio ambiente. Sin embargo solo hace falta muy poca energía por parte de nuestra madre naturaleza para darnos una lección: terremotos, tsunamis, huacanes, incendios, sequías. 

Cuando ocurre un desastre natural, el área afectada se convierte en un microcosmos. Todas las personas buscan desesperadas un foco de atención hacia dónde descargar su confusión y frustración. En este contexto siempre se espera que las personas tomen ventaja de la elevada entropía positiva para sacar provecho. El saqueo y la rapiña es un mecanismo normal y esperable. Si las personas saben de antemano que la situación mejorará entonces deciden robar artículos de última necesidad, pero que en un contexto próximo de normalidad le permitirá subsistir en dicho nuevo concepto más días que en si roba artículos de rápido consumo como agua o comida. La Emergencia es aquello que surge sinérgicamente por la interacción de pautas inesperadas. En una situación apocalíptica, en donde la posibilidad de volver al status quo se vislumbra cercana, hechos deplorables como el saqueo y la rapiña se convertirían en la única forma de subsistencia, aquellos que no lo practicaran se convertirían en el eslabón débil y perecerían debido a la falta de trabajo, suministro de bienes y pérdida del valor del dinero como medio de cambio. Estas propiedades de la emergencia las podemos ver en menor medida en situaciones de extrema urgencia como las que se viven en Acapulco, pero recordemos que después del paso del huracán Sandy también pudimos ver dichos acontecimientos, sin embargo, la voluntad de mantener el control por parte del sistema Americano es tan grande que pudieron neutralizar sus efectos. Eso solo se logra con la fuerza pública, sin embargo lo que se pide en este momento es la ayuda humanitaria para hacer acopio de productos de primera necesidad y regalarlos a quienes lo necesitan. Esos productos pasan por tantos filtros que difícilmente llegan a las manos adecuadas, pasan, principalmente por mafias ya establecidas que también buscan lograr beneficiarse. Obviamente de no ser controlados los actos de saqueo se puede llegar a una situación de anarquía entrópica en donde será mas complicado el suministro de productos de primera necesidad en contextos no apocalípticos.

Paul Watzlawick en su libro "Lo bueno de lo Malo" nos habla de nuestra infinita incapacidad para estar bien en tiempo se paz y calma, y de nuestra inmensa necesidad de atravesar por momentos turbulentos para poder dotar de sentido la realidad puesto que el ser humano solo entiende la vida en esos términos, como caos y violencia.

En estos momentos hay que replantear los cimientos de nuestra civilización. Con el creciente aumento demográfico, cada golpe de la naturaleza afectará a más personas debido a que cada día se concentra más gente en menos espacio y esos espacios explotan desmesuradamente los recursos naturales. Parece una necesitad el establecernos siempre en dónde los recursos sean de fácil acceso, es responsabilidad de los que ostentan el control de la sociedad que impidan el abuso de los límites que la naturaleza reclama para su expresión. No esperemos que un río siempre mantenga su cauce, no esperemos que la tierra nunca tiemble. No esperemos que los vientos jamás sobrepasen la simple brisa. Es un autoengaño el no preparase para lo peor, y es un error invadir lo que la madre naturaleza considera suyo.  Si en Acapulco se inundaron zonas consideradas de alto lujo es porque las tierras son muy bajas y siempre habían sido consideradas pantanosas. ¿Qué espera una tienda como Costco si no hace un análisis de impacto ecológico? Pues simplemente le toca esperar las consecuencias. Además de promover la rapiña por cuestiones económicas puesto que las cláusulas del seguro son diferentes cuando se trata de cuestiones naturales que las que se estipulan en caso de robo. Si no se encuentra la fuerza pública custodiando dichos establecimientos es debido a que precisamente la fuerza es pública y no privada. Si estos establecimientos lo solicitan y se consideran estratégicos entonces se puede entender la intervención del ejercito, de otra forma no. No luchemos contra la naturaleza (incluida la humana), comprendamos sus pautas y preparémonos para el siguiente gran golpe.  

viernes, 13 de septiembre de 2013

El Síndrome del Inquisidor Ético.



La vida propia ofrece un panorama tan desolador que nos invita a voltear a otro lado, a la vida de los demás. Al convertirnos en portentos de la verdad y la rectitud nos vemos obligados a imponer nuestra visión del mundo inclusive a través del uso de la fuerza, derecho heredado por el mismísimo Dios. La historia en su general conjunto es la historia de este trastorno, de este delirio. Esta forma de actuar tiene sus orígenes en la misma estructura social, desde que somos sociedad nos vemos obligados a organizarnos y la organización implica estructura y desafortunadamente jerarquía.

La función de la sociedad es mantener la cohesión del grupo, para lograr eso es necesaria una actividad productiva y cobrar un impuesto para mantener la jerarquía dominante. Esa jerarquía mantiene semejante comodidad que no esta dispuesta a perder el poder, debido a eso organiza la tan temida fuerza pública. Y dicha fuerza pública emerge debido a que las personas no se someten de forma dócil a las imposiciones de la jerarquía, simplemente no se les puede convencer con buenas palabras, se les tiene que someter por la fuerza. Desafortunadamente la estructura social se convierte en un arquetipo que se representa a un nivel más local como la familia, la relación de pareja, la crianza de los hijos, la amistad, y hasta en la relación vecinal. Entonces el bumerán que lanza el estado llega hasta el ultimo eslabón social y vuelve a subir por toda la estructura hasta completar su ciclo de forma ininterrumpida, eterna. A este fenómeno Paul Watzlawick lo llamó el Síndrome del Inquisidor General. Este Síndrome es el que llevó a los jerarcas de la Iglesia del Medioevo a cometer los peores crímenes contra la humanidad pensando que salvaban las Almas de los herejes, esas víctimas no han sido elevadas al nivel de Santos por dicha institución religiosa, simplemente no han reconocido su error. Otro gran ejemplo es el homicidio masivo que cometieron los miembros del partido Nazi contra los Judíos y otras minorías raciales. Eso no les enseñó nada a las víctimas supervivientes, el estado Judío esta repitiendo la fórmula bloqueando cualquier intento de crítica acusando de antisemita, casi Nazi o genocida a cualquiera que intente alzar su voz contra los asesinatos selectivos y masivos del estado Israelí. En estos dos ejemplos esta la prueba de que la historia de la humanidad es la historia del Síndrome Inquisidor General y desafortunadamente mientras haya sociedad habrá quienes reclamen el derecho a someter a los demás a un mismo esquema de realidad.

A los que proclamamos el Respeto como única forma de relacionarnos entre seres humanos y como pauta para promover la supremacía de la naturaleza en nuestra realidad nos llamamos los Inquisidores Éticos. Simplemente no sometemos a los demás a un régimen donde solo se puede hablar o hacer lo que permitimos. Esto es necesario porque si el otro no puede ser libre, en algún punto de la historia nuestros súbditos volverán con poder para lincharnos, cortarnos la cabeza en la guillotina o en el mejor de los casos, nos condenaran a la pena capital. Esto ocurre porque la imposición siempre genera resistencia y el deseo por cambiar las cosas, sin embargo, esto se convierte en otro delirio mas, el delirio de cambio. Los de abajo emergen para desplazar a los gobiernos regentes solo para convertiste en los mismos Tiranos que desterraron, de esta forma sellan su destino, sembrar la semilla de la resistencia en los que no lograron engancharse al nuevo régimen. Parece que no hay solución general a este problema, solo a nivel personal podemos tomar la decisión de respetar la vida en todas sus manifestaciones. Los demás si no lo hacen, la misma realidad, la misma sociedad y el mismo planeta se encargará de mantener el Tao.

sábado, 13 de abril de 2013

La nueva organización Familiar.


Hay tres factores que determinan la nueva organización familiar en el año 2013, éstas son: la económica, la ecológica y la tecnológica. Obviamente el objetivo de esta reflexión es descifrar la conveniencia de formar una familia a la vieja usanza sin tomar en cuenta los factores que acabo de mencionar. El aspecto económico.

Hoy en día la población medianamente preparada no puede acceder a un trabajo bien remunerado y menos a seguridad social. Esa franja de población que antes llamábamos clase media fueron víctima de un fraude que bajo la mirada religiosa se puede denominar como demoniaco. En realidad fue una trampa, los magnates inquisidores anticibernéticos tendieron un camino delicioso con abundante miel, le decían a la gente que podían vivir el sueño de ofrecerles a su familia un hogar a la voz de ya y sin tener el dinero para ello.

Debido a que no hay división alguna entre empresarios y políticos (la política es una empresa privada) les fue muy fácil provocar una crisis económica que provocara una serie de despidos masivos, quiebres de bancos, desplomes de bolsa. Es fácil porque al retirar el capital de un banco, éste se va a pique, al vender miles de acciones, la bolsa baja, y muy pocas personas tienen ese poder, la voluntad de una, dos o tres personas pueden provocar ese efecto. Al no haber dinero circulando o créditos los que pagan los intereses altos son los empleados, son despedidos por la falta de ventas debido a que la gente no compra por miedo a quedarse sin dinero.

En realidad el drama lo vive una franja muy determinada de la población, hay personas que ya tienen una o varias propiedades y un trabajo indispensable para la vida como los que se dedican a la comida, el agua, la salud, la ropa, el entretenimiento. Los que cayeron en esta trampa son personas muy moldeadas para seguir un patrón familiar concreto en donde sus valores están orientados a reproducirse, mantener una familia, darles un hogar, educación, salud, seguridad y bienestar. Normalmente quieren una familia amplia y buscan ofrecerles todo aquello de lo que carecieron de niños. Es por eso que buscan siempre cumplir con cualquier capricho de sus hijos, buscan crear una imagen de superioridad ante la sociedad a través de la mejor casa, el coche nuevo, la tele nueva, la cocina amplia, la banda más ancha de internet y un largo etc. Todo este montaje se paga gracias a los créditos otorgados pero las personas no saben hacer un presupuesto y mucho menos se preparan para hacer frente a situaciones emergentes, piensan que siempre van a tener salud para trabajar, que siempre van a tener trabajo, que siempre van a tener dinero. Todo esto lo saben los magnates porque es una lógica muy simple y ante esto es muy fácil tenderle una trampa a personas tan ingenuas y dóciles. El famoso sueño americano es una trampa mortal, hoy en día lo sabemos, lo hemos visto y lo sufrimos. Pero ¿Qué hacer? ¿Qué posibilidades hay? Hay que reorganizar nuestros pensamientos en caso de ya tener una familia exigente y plantear una estrategia exitosa que les permita a los novatos tener más posibilidades de lograr establecer una familia en el extenso sentido de la palabra. En primer lugar hay que hacer frente a la idea traumática de que los niños merecen todo lo que piden y lo merecen precisamente porque a uno le hizo falta o sintió que le hizo falta. Los niños perciben nuestra frustración y su cerebro esta especializado para lograr lo que quieren, es un mecanismo biológico de supervivencia, son chantajistas pero lo hacen para no morir de hambre.

El mayor gasto familiar se va en cosas superfluas como accesorios de bebes (ropa de marca, cunas caras, etc), después en cosas nuevas (coches, televisiones, smartphones), le sigue la sobreabundante comida (McDonalds, KFC). Todo eso provoca gastos emergentes como la gasolina, aditamentos para el auto, televisión de pago, planes de renta mensual, atención médica por problemas derivados de la desnutrición y la obesidad. Un factor psicológico de las personas es que se reproducen a temprana edad porque piensan que necesitan una motivación para trabajar duro y que así disfrutaran por más tiempo a sus hijos inclusive a sus nietos. Todos estos valores son artificiales y muy poco valiosos. Deberíamos plantearnos sin hipocresía ni egoísmo que los hijos tienen como misión biológica ser individuos independientes, sin embargo queremos que los hijos nos veneren mas que a dios, que seamos siempre indispensables, que nos agradezcan todo lo que hemos hecho por ellos. Los hijos deben crecer e irse y nunca mirar atrás, eso es lo que hemos hecho nosotros, porque pensamos que nuestra familia es horrorosa, pensamos que nuestros padres no nos dieron todo y por eso no los respetamos. Pues nuestros hijos tienen sus propias ideas de qué es estar satisfecho, al igual que nosotros. Lo que debemos hacer es abandonar todos nuestros prejuicios, absolutamente todos, debemos renunciare al egoísmo, a la hipocresía.

Olvidemos que necesitamos una gran boda para empezar bien el matrimonio, olvidemos las joyas, los anillos de compromiso, olvidemos las casas ostentosas y contaminantes, olvidemos los accesorios de lujo, las escuelas caras, los salones de belleza, las vacaciones VTP, los clubs VIP. La familia en el año 2013 debe seguir una serie de nuevos valores, en primer lugar debemos preguntarnos si podemos garantizar el futuro de nuestros hijos, si no tenemos dinero, si vivimos al día, es mejor ahorrar hasta tener solvencia, no importa si eso ocurre a los 40, 50 o 60 años. El hombre tiene un rango mayor para reproducirse. Las mujeres no deben esperar por el príncipe azul, porque a sus 17 años, sintiéndose cenicientas creen haber tenido éxito cuando encuentran a un gañan con buen discurso pero que lo único que quiere el tipo es disfrutar los 15 minutos de placer. Las mujeres deben prepararse para criar a sus hijos solas porque una gran mayoría encuentra que su pareja no es lo que buscaba y termina criándolos sola. De igual forma las mujeres deben esperar hasta tener un capital que garantice el futuro de sus hijos inclusive si ellas faltan. También hay que replantearnos el hecho de que estamos obligados a tener descendencia, normalmente los hombres acceden a tener familia debido a que sienten que los abuelos o la esposa y la sociedad se los exigen, sienten el peso de la mirada de los demás cuando no tienen hijos, acusándolo de tener tendencias homosexuales o de ser estéril. Hay que tirar todo esos traumas a la vil basura, es tan fácil como no pensar en ello.

Estamos condenando a nuestros hijos a sufrir de forma horrenda si no nos damos cuenta que estamos por alcanzar un nivel crítico en donde la naturaleza no podrá producir suficiente alimento y agua para los más de 7mil millones que somos.

Hoy en día lo único indispensable es la conexión a internet, pero debemos consumir información y cultura en lugar de tanta pornografía. La televisión es un invento que debe desaparecer, el uso del coche también se debe reducir pero eso es inminente aunque no lo hagamos voluntariamente porque el precio de la gasolina nos impedirá su uso diario. Si no nos preparamos el estado y la naturaleza tomará cartas en el asunto para controlar a la población, eso sucedió con la epidemia de viruela en el nuevo mundo, de gripe aviar en España, con las guerras mundiales, con los desastres naturales, las armas biológicas modernas y las crisis económicas.

Ahora ya lo sabemos, de aquí en adelante debemos organizar foros y conferencias para seguir desarrollando un nuevo modelo de familia, también debemos ser cuidadosos de no caer en síndromes inquisidores, no debemos imponer un modelo, cada uno debe decidir, el problema es que hasta ahora la decisión la toman los abuelos, la esposa, la presión social. Es un modelo impuesto que les permite a los poderosos manipularnos y controlarnos, inclusive eliminarnos. Reflexionemos ahora, mañana podría ser demasiado tarde.

viernes, 12 de abril de 2013

El extraño caso de la Entropía 2.0


La entropía lo organiza todo, pero ¿qué organiza la entropía? ¿Quién encendió la chispa primigenia? ¿Qué desató el big bang? Hoy sabemos que la entropía que proviene del sol hizo posible la vida en la tierra, eso sumado a factores totalmente fortuitos como la distancia con respecto al sol y otros planetas, el ángulo de inclinación de la tierra, entre otros factores, es que la vida pudo emerger. Como buenos observadores, cuando encendemos un fósforo, claramente vemos cómo éste poco a poco se va apagando, la entropía (que significa 'no trabajo') provoca que su energía se disipe en el medio y su combustible se agote llevando a dicho fósforo a ser prácticamente inservible. Pero no ocurre lo mismo con el universo, parece que después de semejante explosión, dicha energía siguió un proceso que metafóricamente hablando va desde un fósforo quemado, pasando por un proceso de recuperación de combustible hasta convertirse en un cerillo encendido de forma perpetua, que nunca se apaga. Es así, el universo se encontraba en un estado de no existencia, después explota algo que según estaba condensado y de ahí las estructuras subatómicas formaron cuerpos celestes cuyo combustible alimenta a sus vecinos cercanos, dotándolos de un pretexto para existir. Sabemos que en un medio de cero absoluto no existe vida y tampoco en un ambiente supercaliente porque las estructuras con base en el carbono tienen poca tolerancia al calor.

Nada en el planeta tierra es prescindible. Todo juega un papel importante para mantener las condiciones que permiten la vida. El clima cumple con una serie de tareas que hace posible diferentes escenarios donde crecen diferentes especies de plantas y animales. Los minerales son importantes para formar estructuras de ADN que forman bacterias que al parecer nos provocan daños pero al mismo tiempo liberan sustancias que permiten ciertos procesos químicos que reciclan cuerpos orgánicos. El ser humano es el único factor de ruido en el universo. No tenemos pruebas de que existe vida en otros rincones del universo sin embargo sabemos que existe, la prueba desapercibida es nuestra propia existencia que vuelca la balanza de la estadística hacia la confirmación de dicha cuestión. Pero el ser humano ha dedicado su trabajo a destruir las condiciones que permiten la vida, es un acto de ignorancia pero también tiene un propósito de mantener la percepción de poder de ciertas personas muy estúpidas pero que tienen mucho dinero. La realidad tiene que ser diferente a la que observamos ahora para poder se considerados seres coherentes con el sistema biológico.

Los seres humanos estamos paralizados por el miedo, estamos empequeñecidos por la ignorancia, somos depredadores obesos, no mantenemos un equilibrio con la naturaleza, la comunicación con la vida es disfuncional, no escuchamos a la naturaleza, ésta nos recomienda no vivir en ciertos lugares, no matar cierta cantidad de seres vivos porque pueden desaparecer, no cortar árboles cuya función es la de proporcionar oxígeno sin el cual no vivimos ni 5 minutos. Los sistemas políticos y de poder deberían buscar el equilibrio social, promover el conocimiento de nuestra integración con la naturaleza pero el único objetivo de estos seres basura es la de ganar un dinero que no podrán disfrutar mas que por un período de tiempo que estadísticamente no supera los 80 años. Hay personas que llegan a vivir más de cien años con muy pocos recursos económicos. Hay ejemplos de hombre con mucho dinero y poder que no llegaron a disfrutar lo que provocaron, ejemplos de ello pueden ser Steve Jobs, Hugo Chavez, Hitler, etc. No podemos comprar la vida, ni el tiempo. La entropía de nuestro cuerpo es un proceso doble que al mismo tiempo que le permite crecer y desarrollarse también desgasta nuestros átomos disolviéndose poco a poco hasta perder la capacidad de seguir produciendo todo aquello que nos liga y estructura.

El descubrimiento de lo que implica la vejez nos hará crear métodos científicos para que en este milenio alcancemos un prospecto de vida de casi doscientos años. Eso será posible siempre y cuando logremos integrar nuestro vivir con el funcionamiento de la naturaleza, si no lo hacemos activaremos el poder de preservación del planeta, provocando grandes cataclismos que nos eliminaran poco a poco, inclusive rápida y súbitamente. No podemos contaminar sin esperar que el planeta nos siga permitiendo respirar aire limpio y comida sana, si contaminamos nos veremos a respirar y comer veneno, nuestros cuerpos sucumbirán al cáncer de forma irremediable.

Todo en el universo es cibernético, no debemos ser ingenuos pensando que podemos hacer lo que se nos ocurra, no tenemos un cheque en blanco para hacer lo que nos plazca, entonces deducimos que tenemos un propósito y un deber cuando nacemos, sin embargo hay millones de personas obesas, o que solo se la pasan postradas en la cama viendo programas que los programan para ser infelices y siempre buscar comprar objetos que llenen el vacío existencial que ellos mismos nos han convencido de que existe y andamos arrastrando. Si al nacer fuésemos como el joven Benjamin Button la entropía en realidad no es diferente al proceso que los simples mortales atravesamos. El verdadero proceso contrario seria que de las cenizas surgiera un ser humano adulto y viejo que poco a poco se fuese haciendo joven hasta convertirse en un cigoto y separase en dos células que finalmente desaparezcan en un proceso termodinámico que provoca su disipación con la nube de estructuras subatómicas. En realidad, por donde lo veamos, nosotros atravesamos el mismo proceso, provenimos de la nada y nos dirigimos a la nada.

Si las estructuras que producen estructuras desaparecen entonces el gran esfuerzo del universo por autoconocerse sería en vano. Pero el universo no pone todos los huevos en una misma canasta, de ahí la prueba de que en el universo sí hay vida que cumple con su función, la de conocerse a ellos mismos y mantener un equilibrio con su medio mientras que a través de su inteligencia crean tecnología que les permiten colonizar otros planetas, cosa que es un imperativo para toda raza capaz de transformar al universo, que es lo mismo que aquello que llamamos consciencia.

martes, 9 de abril de 2013

UTROPÍA UTÓPICA ISOTRÓPICA.



Un pequeño concepto tuvo el poder de revolucionar el mundo a partir del siglo XIX, ese concepto nació como un extraño experimento que desató las creencias irracionales de mentes tan brillantes como la de James Clerk Maxwell cuya fascinante invención la denominó “El Demonio de Maxwell”. Dicho nombre estaba inspirado en su absoluto asombro al observar las leyes que tanto defienden los científicos totalmente violadas. Lo que observó es tan sencillo de explicar como decir que lo caliente se calentaba cuando se ponía en presencia de algo frío, entonces la diferencia de temperatura no producía un equilibrio entre las dos  diferencias sino que ocurría todo lo contrario. A ese fenómeno lo llamó Entropía, sabiendo de antemano que no había utilizado la etimología correcta, porque su intención era describir un fenómeno que tendía a energía 0, lo que hoy llamamos el cero absoluto, aquello que no tiene movimiento molecular. 

El verdadero concepto que quiso acuñar era el de Utropía debido a que la traducción literal de su investigación era la de explicar aquello que “no trabaja” o no “produce movimiento”. El único concepto disponible en la época era uno muy literal, el de Utopía, aquel lugar que no es lugar porque las leyes de la psicología no corrían en la orientación natural, sin embargo, todo funcionaba correctamente, eficientemente, justo como debía de ser. Esa poesía se soslaya con la teoría de Maxwell, sus conceptos nos permitieron explicar cómo se formó todo en el universo. En lugar de que el universo se enfriara después del Big Bang y su energía se disipara sucedió todo lo contrario, se formaron estructuras tan fascinantes, estrellas autopoiéticas, cuya luz, fuerza y energía emanan de la misma energía que produce, es un cuerpo de movimiento perpetuo, es un ser cibernético, es nuestro sol y el sol de muchos sistemas a lo largo y ancho de este isotrópico universo. 


El universo es isotrópico porque las estrellas, todas, tienen la misma estructura, cumplen con las mismas leyes, violan las mismas leyes. Así también, nuestro planeta no es el único en el universo capaz de albergar vida, hay tantas posibilidades en el universo como se nos antoje pensar. no debemos ya seguir dudando si habrá o no vida en otros planetas porque sí la hay, la prueba es que la hay en este planeta en que vivimos, por lo tanto, a la pregunta de ¿Hay vida en el universo? La respuesta es un rotundo sí. La razón es que si algo nos pasa a nosotros, el universo tiene que seguir existiendo y sin nosotros el universo tampoco existe. Somos los ojos del universo, el Universo se conoce a sí mismo a través de nuestra mente organizada por estructuras nerviosas que no son más que luz organizada, luz que proviene desde los orígenes del universo y que al tener estructura mediante procesos cibernéticos de acumulación de entropía. 

Debemos vivir nuestra existencia contemplando el Universo, esa es nuestra única función. Si no lo hacemos empezamos a sufrir porque perdemos nuestro sentido, significado y propósito. Si destruimos a la naturaleza nos destruimos a nosotros porque nuestra relación con ella es tan íntima como lo es el sistema circulatorio con la respiración y el oxígeno. Toda actividad que busque cumplir objetivos económicos o sociales como el ostentar jerarquías, rangos o poder es totalmente fútil, irracional y antinatural. La razón es que todos dejaremos de existir en algún momento, la vida es breve y no tenemos pruebas de que volvamos a tener otras oportunidades, por lo menos nuestra configuración jamás se podrá reensamblar de tal forma que en otra vida seamos como fuimos y lo recordemos. No habrá una continuidad a pesar de que todos nuestros átomos que una vez nos conformaron vuelvan a conformar otro ser humano. Es por eso que hay que estar muy conscientes de nuestra actividad, respetar y honrar nuestra misión. Solo así nuestra única vida tendrá un final feliz. 

viernes, 5 de abril de 2013

Para emerger hay que llegar al fondo.


Es en la hora mas oscura cuando hay que demostrar fuerza, paciencia y fe. Todo aquel que quiera ser feliz tiene que enfrentar situaciones amargas y desesperantes. Es esencial ser infeliz porque te das cuenta que lo contrario que te hace infeliz no produce felicidad. La felicidad es la mas rara de las preseas. Hay quienes han saboreado las mieles de este elixir durante varios momentos a través de la vida hasta que de pronto y súbitamente aparecen los fantasmas como la muerte, la separación, la pobreza, la violencia y el aburrimiento. 

Los miserables se dieron cuenta muy tarde que la felicidad no proviene del acaparamiento de bienes, tampoco proviene del poder o de la autorrealización. La felicidad es un fantasma que se presenta para aterrorizarnos porque cuando sentimos un halo de felicidad también sentimos el pavor de poder perder lo que creemos que nos hace feliz, el miedo es tan grande, que tus poros empiezan a exudar adrenalina. 

La desesperación es tan abrasador que el depositario de esa felicidad se lanza a la destrucción del ser amado, del objeto amado, del poder ostentado, lo anterior es un acto desesperado para no continuar sufriendo las ideas irracionales de poder perder la dicha y la felicidad. Es diferente el sufrimiento que proviene de ser feliz y perder la felicidad al de ser feliz y destruir todo lo relacionado con esa felicidad, porque lo primero es una desgracia, lo segundo es un acto voluntario, que produce paz y tranquilidad pero al mismo tiempo se abre un vacío tan grande como el mismo universo. ¿Cuáles son las claves de la felicidad? Aquellos que quieran ser felices tienen que preparse para atravesar el lado más caliente del infierno emocional. 

Aquellos que creen que a través de la bondad y la santidad lograran la máxima felicidad tienen que prepararse para ser crucificados de cabeza. Los que creen que con el dinero obtienen el máximo placer de la felicidad deben prepararse porque cuando el dinero se acabe los amigos y la familia saldrán despavoridos con tal de que no les pidas ayuda a pesar de haber compartido con ellos tu riqueza. Aquellos que creen que la pareja ideal, la boda de ensueño, los hijos perfectos son la raíz de una vida llena de bendiciones y felicidad deben prepararse para el aburrimiento de estar con una misma persona, las infidelidades, el nido vacío, las enfermedades raras, los accidentes y la muerte de los seres amados. 

La felicidad es pues un laberinto, un arma de doble filo. Sus efectos secundarios son devastadores. Casi podría afirmar que la felicidad no existe, es mas una ilusión, una broma muy pesada de la vida. Pero la felicidad solo proviene del hecho de aceptar que la felicidad no existe, que nunca se puede ser plenamente feliz, que el ser feliz es una decisión, que pase lo que pase, aunque las desgracias lleguen a tu vida como si te tocara el premio mayor de la lotera tu mantengas tu decisión de ser feliz.

sábado, 16 de marzo de 2013

¿Todo tiene (un) fin?

Es curioso que hayamos alcanzado este nivel de sofisticación como civilización si tomamos en cuenta que al pensar que todo lo que nos proponemos no tiene ningún sentido dado que el resultado de nuestro andar es la disolución biológica de nuestro cuerpo y la incorporación de nuestro espíritu a la incertidumbre. ¿Qué sentido tiene hacer o decir algo si todo termina irremediablemente y nunca nunca podremos recuperar la experiencia de esta vida en un momento posterior? ¿Bajo qué preceptos hemos desafiado la entropía carroñera que todo lo disuelve? Inclusive resulta tedioso, aburrido y encadenante para la mayoría de los mortales estar con una sola persona y compartir la experiencia de ser testigos presenciales y flagrantes de una vida sin sentido. ¿Es posible que el principio del placer por sí mismo haya cimentando nuestra realidad configurándola de tal forma que parece que vivimos buscando objetivos sublimes, trascendentales y metabiológicos? La respuesta es si. Porque la mayoría de la población en todas las etapas de la civilización han vivido, trabajado, soñado y luchado solo para vivir una experiencia placentera ya sea a través del sexo, de la comida, del amor, de los lujos, del acaparamiento, del reconocimiento ajeno y del poder. De forma aparte, esa mayoría que también resulta pertenecer a la categoría de las personas ignorantes han justificado o enmascarado sus verdaderos impulsos aduciendo a un supuesto "amor" por su pareja e hijos al mismo tiempo que su objetivo principal es la expiación de sus pecados mediante la fe y el autosacrificio de tal forma que salvará su alma y logrará la promesa de la vida después de la vida. Pero la fe se sostiene sobre sí misma, no hay pruebas de qué algo llamado karma, reencarnación exista. Tampoco hay pruebas de que un lugar como el cielo o el infierno tengan materialidad real. La Iglesia moderna explica sus creencias con base en el materialismo concreto, jamás nadie, ningún miembro de la Iglesia ha hecho referencia al constructivismo del que somos hijos.

Entonces es abrumador e impresionante pensar que el único concepto para explicar semejante avance tecnológico y técnico se deba al autoengaño, pone la piel de gallina. Nuestra civilización muestra su verdadera cara gracias a la entropía: nuestros edificios se deterioran, nuestras máquinas se descomponen, la gente se suicida, asesina, lastima y lesiona a sus semejantes, las personas se dividen creando países, religiones que después se vuelven antagónicos y se embarcan en cruzadas, guerras santas y preventivas. Esta claro que la verdadera religión de Los Estados Unidos es la guerra, su verdadero dios el petróleo y la única doctrina el sometimiento de los pueblos. Curiosamente son los más desvergonzados al poner el nombre de dios hasta en la sopa, su fanatismo extremo extirpa con fórceps su verdadero rostro del resto del mundo. Pero todo termina. Los países ricos se vuelven pobres. Las personas se aburren de sus parejas. Los hombres pierden la fe. Los edificios colapsan. Los recursos naturales se acaban, el dinero desaparece y al final, la vida acaba. Entonces nuestra civilización es un zombi, un muerto viviente, decadente, mundano, putrefacto.

¿Como se vería una civilización congruente? Primero que nada, nosotros mismo deberíamos pensar mucho mucho antes de tener un hijo, sin embargo, la gente más pobre por ignorancia tiende a reproducirse como si fueran millonarios y necesitaran de una prole inmensa para dejarles sus abundantes recursos. En el reino animal se cumplen ciertas reglas de control de la población para garantizar la subsistencia de TODOS, si estas reglas no se cumplen TODOS sufren la extinción. QUE MIS PALABRAS NO SIRVAN PARA JUSTIFICAR METODOS DE REDUCCION DE LA POBLACIÓN, TODOS TENEMOS DERECHO A VIVIR Y MORIR DE FORMA NATURAL.

Los seres humanos debemos actuar apegados a las reglas de la naturaleza, debemos ser moderados en nuestra reproducción por el simple hecho de que estamos en el primer puesto de la cadena alimenticia, no tenemos quién controle nuestra población, lo han intentado como lo hizo la doctrina Nazi, los que arrojaron la bomba atómica, etc. Pero los estigmas de esa psicosis nos persigue hasta el día de hoy como ácido en los ojos. Otra de las características de una civilización madura sería nuestra integración con la naturaleza, nuestro aire estaría limpio, el agua seria potable en todo el mundo, la comida seria abundante y libre de pesticidas. En algún momento tuvimos un planeta así pero eran momentos que solo a través de la esclavitud logramos impulsar el avance tecnológico hasta el momento actual. Si en tan solo cien años hemos devorado un patrimonio que debería durar hasta que el planeta muera dentro de millones de años, imaginemos lo que le depara a la generación que acaba de nacer en esta década.

Sin embargo todo se acaba, y cuando se acaben los recursos o el dinero para comprarlos entonces habrá una corrección, una vuelta al origen, así lo dicta la cibernética. Muchos moriremos, y las ciudades de hormigón y acero desaparecerán de tal forma que los arqueólogos modernos jamás podrán encontrar ni un solo tornillo para probar los que serán los mitos y leyendas de una Atlántida moderna, de una Sodoma y Gomorra posmoderna y contemporánea. Todo tiene fin pero ¿Tiene todo UN fin? La finalidad de todas las cosas que hacemos es vivir una experiencia que forme un espíritu que seguramente nos servirá para algo más en un lugar lejano, en una realidad que sí existe.