Cuando menos te das cuenta, de repente ya estas en un
laberinto mental, en una trampa epistemológica o una cárcel emocional. ¿Es posible vislumbrar las
consecuencias de andar por un camino o por otro? Mi opinión es que sí se puede. ¿Por qué lo se? Primero porque la
cibernética dice que todo es
circular, si alguien imprime una fuerza, sin importar la dirección que sea, siempre habrá una retribución. Segundo porque la entropía siempre tiende a cero, esto
quiere decir que el más complejo caos termina por
disiparse en el horizonte de lo más simple: la nada, lo inerte.
Tercero porque las personas que fracasan al implementar una solución terminan pensando que las razones de su fracaso pueden
ser las mismas que las del éxito, prosiguen implementando dicha
solución solo para darse cuenta que
el problema no solo no se resolvió sino que empeoró de forma dramática. Cuarto porque cuando una
persona encuentra que algo es bueno para sí mismo enseguida piensa que
puede manejar una dosis mayor de eso que es bueno, placentero,
desafortunadamente uno termina dándose cuenta que esa fue la
semilla de la adicción que los llevó a conocer lo que es el fondo de la realidad.
Pueden saltar de sus asientos al deducir que es posible
predecir acontecimientos o conductas futuras pero solo basta reflexionar sobre
la circularidad de la realidad: no hay un futuro, el tiempo es solo presente y
simultáneo. Precisamente la cibernética nos permite reconocer pautas y secuencias de hechos,
por lo tanto sabemos que si una persona intenta imponer su "verdad" a
otra perdona o grupo sabemos lo que ocurrirá porque siempre ocurre lo
mismo cuando una persona o grupo hace eso. Es la historia de las religiones,
del holocausto y la inquisición. En el ámbito humano, las pautas de conducta siempre tienen la
misma resultante, es por eso que a pesar de tener fobia a una multiplicidad
infinitamente creativa de animales, situaciones, o lo que sea, siempre pero
siempre podemos categorizar esas pautas como "Fobia", "Obsesión", "Anorexia", o cualquier etiqueta impresa
en la Biblia del DSM-IVr.
La clave para subirnos al torbellino de la fatalidad es
sobrepasar la energía necesaria que se requiere
para cualquier actividad, pensar de más te vuelve paranoico, abusar
de cualquier sustancia te vuelve obeso, diabético o adicto a las drogas,
cuando la entropia llega a cero en esos casos lo más común es que la persona sufra una
sobredosis y muera. En e universo, el secreto para mantener todo en
funcionamiento es la "estabilidad"
y el "cambio". Es la relación de esas dos fuerzas la que
permite mantener la estructura que da fundamento al mismo universo. A veces
cuando las cosas van mal hay que promover el cambio, haciendo algo diferente,
pero a veces, lo mejor es mantener las cosas tal y como están siempre y cuando la vida dependa de eso, un ejemplo sería mantener a las plantas, árboles y sistemas alimenticios
seguir su curso normal si de pura casualidad queremos seguir vivos, sino pues a
talar, deforestar y cazar.
También el trabajo puede ser
adictivo, inclusive pensar puede ser una de las adicciones más placenteras debido a los rincones más infinitos que la realidad puede permitir, hay millones de
obras literarias, millones de obras de arte, millones y millones de canciones,
melodías, poesías, teorías científicas, etc. Es inaudito pensar que se puede llegar a un
minimalismo mental, que consiste en dejar a un lado los conceptos dualistas que
pueblan la totalidad de la realidad. Es la utilización de conceptos la que distorsiona nuestra percepción, liberarnos del pensamiento que nos da identidad puede
llegar a ser una tarea demasiado complicada pero no imposible y definitivamente
la única solución para problemas que no existen.