viernes, 16 de noviembre de 2012

La Sobredosis.


Cuando menos te das cuenta, de repente ya estas en un laberinto mental, en una trampa epistemológica o una cárcel emocional. ¿Es posible vislumbrar las consecuencias de andar por un camino o por otro? Mi opinión es que sí se puede. ¿Por qué lo se? Primero porque la cibernética dice que todo es circular, si alguien imprime una fuerza, sin importar la dirección que sea, siempre habrá una retribución. Segundo porque la entropía siempre tiende a cero, esto quiere decir que el más complejo caos termina por disiparse en el horizonte de lo más simple: la nada, lo inerte. Tercero porque las personas que fracasan al implementar una solución terminan pensando que las razones de su fracaso pueden ser las mismas que las del éxito, prosiguen implementando dicha solución solo para darse cuenta que el problema no solo no se resolvió sino que empeoró de forma dramática. Cuarto porque cuando una persona encuentra que algo es bueno para sí mismo enseguida piensa que puede manejar una dosis mayor de eso que es bueno, placentero, desafortunadamente uno termina dándose cuenta que esa fue la semilla de la adicción que los llevó a conocer lo que es el fondo de la realidad.
Pueden saltar de sus asientos al deducir que es posible predecir acontecimientos o conductas futuras pero solo basta reflexionar sobre la circularidad de la realidad: no hay un futuro, el tiempo es solo presente y simultáneo. Precisamente la cibernética nos permite reconocer pautas y secuencias de hechos, por lo tanto sabemos que si una persona intenta imponer su "verdad" a otra perdona o grupo sabemos lo que ocurrirá porque siempre ocurre lo mismo cuando una persona o grupo hace eso. Es la historia de las religiones, del holocausto y la inquisición. En el ámbito humano, las pautas de conducta siempre tienen la misma resultante, es por eso que a pesar de tener fobia a una multiplicidad infinitamente creativa de animales, situaciones, o lo que sea, siempre pero siempre podemos categorizar esas pautas como "Fobia", "Obsesión", "Anorexia", o cualquier etiqueta impresa en la Biblia del DSM-IVr.
La clave para subirnos al torbellino de la fatalidad es sobrepasar la energía necesaria que se requiere para cualquier actividad, pensar de más te vuelve paranoico, abusar de cualquier sustancia te vuelve obeso, diabético o adicto a las drogas, cuando la entropia llega a cero en esos casos lo más común es que la persona sufra una sobredosis y muera. En e universo, el secreto para mantener todo en funcionamiento es la "estabilidad"  y el "cambio". Es la relación de esas dos fuerzas la que permite mantener la estructura que da fundamento al mismo universo. A veces cuando las cosas van mal hay que promover el cambio, haciendo algo diferente, pero a veces, lo mejor es mantener las cosas tal y como están siempre y cuando la vida dependa de eso, un ejemplo sería mantener a las plantas, árboles y sistemas alimenticios seguir su curso normal si de pura casualidad queremos seguir vivos, sino pues a talar, deforestar y cazar.
También el trabajo puede ser adictivo, inclusive pensar puede ser una de las adicciones más placenteras debido a los rincones más infinitos que la realidad puede permitir, hay millones de obras literarias, millones de obras de arte, millones y millones de canciones, melodías, poesías, teorías científicas, etc. Es inaudito pensar que se puede llegar a un minimalismo mental, que consiste en dejar a un lado los conceptos dualistas que pueblan la totalidad de la realidad. Es la utilización de conceptos la que distorsiona nuestra percepción, liberarnos del pensamiento que nos da identidad puede llegar a ser una tarea demasiado complicada pero no imposible y definitivamente la única solución para problemas que no existen.